miércoles, 12 de junio de 2013

'Evento' mejor que 'acto'

I Congreso Universitario de Comunicación y Eventos que tan brillantemente ha promovido de forma reciente en Madrid el Instituto Superior de Protocolo y Eventos (ISPE) y la Universidad Camilo José Cela UCJC), ha servido para apagar algunas voces críticas puestas de manifiesto al analizar la idoneidad de la palabra evento en su actual significado.
La utilización del término evento no gusta en determinados ambientes pero los argumentos expuestos no justifican, en absoluto, esta actitud. Estos mismos creen que echando mano de la palabra acto está definido en toda su extensión lo que se pretende decir con evento. Y no llevan razón por los motivos que ahora comentaré.
La RAE define, genéricamente, el sustantivo masculino singular evento como “acaecimiento”, es decir, algo que acaece, acontece o sucede señalando acto como un hecho público o solemne cuando lo cierto es que podríamos citar ejemplos de eventos poseedores de otras cualidades pero carentes de solemnidad.
Sinceramente, creo que la palabra evento goza en la actualidad de más seguidores porque la mayoría nos inclinamos por su origen etimológico (del latín eventus) que traducido libre y descontextualizadamente, el evento resulta ser un hecho con resultados y consecuencias.
A pesar de ello, no haríamos bien en malgastar tiempo en intentar convencer a estas alturas de que evento es algo que va a acontecer, que interesa al público, mucho o poco, y cuya organización, vigilancia y responsabilidad corresponde a disciplinas en cuya enseñanza y adiestramiento está volcado el ISPE. Para más información, conocer que el tratamiento anglosajón utiliza event, sin más.
En lo que sí deberíamos emplear tiempo y esfuerzo, sustituyendo el dicho popular de que “pleitos tengas y los ganes”,  por el de “eventos tengas y los organices”, es en dotar de un mayor dinamismo y prosperidad a este tipo de actividad que, poco a poco, va descubriendo sus posibilidades reales de consolidarse definitivamente contribuyendo de forma decisiva a la superación de la crisis económica de nuestro país.
O sea, lo dicho, eventos y cuantos más mejor.

El 52% de los profesionales de eventos no cuenta con un plan de gestión de riesgos


“Existen notables diferencias entre las políticas de eventos que las empresas establecen y las actuaciones que finalmente se llevan a la práctica”. Esta, cuanto menos preocupante afirmación, es la conclusión a la que llega American Express Meeting & Events después de realizar un estudio en el que se recoge el testimonio de importantes profesionales del sector a nivel nacional e internacional.
El análisis desvela que el 51% de los planificadores de eventos entrevistados opina que el riesgo no está adecuadamente contemplado por sus empresas. Asimismo, un 52% de ellos no cuenta con un presupuesto cerrado en el momento en el que empieza a planificar el evento en cuestión.
Frente a la realidad de que la mitad de los planificadores no trabajan con un presupuesto cerrado, el estudio indica que el 82% de los directivos recomienda precisamente lo contrario: un presupuesto cerrado a la hora de planificar el evento. Asimismo,las empresas parecen gastar innecesariamente por no ejecutar los seguros de cancelación o impago. El 36% de los travel managers no suelen contratar este tipo de seguros y el 50% de los directivos (marketing, recursos humanos, compras...) aseguran que las políticas de sus empresas no los requieren.
Por su parte, Milton Rivera, vicepresidente mundial de Desarrollo de Negocio de American Express Meetings Events, afirma que el no contar con un plan de gestión de riesgos asociado a la realización de reuniones y eventos puede traer "graves consecuencias, tanto financiera como legales y de reputación de marca para las empresas". Entre las recomendaciones para atajar esta situación, Rivera apunta el incorporar un anexo en el contrato de la organización del evento de contratación de todos los servicios adicionales y la asignación de las personas de la empresa autorizadas en la firma de contratación de servicios.
eventos
El consejo de Rivera es utilizar herramientas tecnológicas adhoc para apoyarse en presupuestos estimados, centralizar los costes y maximizar el control de gastos asociados al evento, pero el 85% de los directivos no disponen de ellas.
Otra brecha se abre en materia de seguridad. El estudio refleja que el 64% de los planificadores de eventos y el 50% de los directivos no disponen de un plan de localización de los asistentes a un evento en situaciones de emergencia. Siendo la seguridad un aspecto crítico en todos los eventos, el directivo de American Express indica que "es imprescindible tener un protocolo operativo que contemple un plan de contingencia constantemente actualizado para situaciones de emergencia y posibles fallos técnicos".

Protocolo en la entrevista de trabajo


¿Sabe usted qué vestimenta es la adecuada para una entrevista laboral? ¿Qué decir o hacer para dar una buena impresión y no caerle mal a un empleador? El protocolo para entrevistas es una parte importante del éxito de una búsqueda, si bien con frecuencia no es tenido en cuenta.

Hoy en día, por más que el ambiente laboral es más distendido en lo que a vestimenta se refiere, para los empleadores la apariencia sigue pesando lo suyo. Victoria Goñi, Directora de RR.HH. de una empresa de servicios, opina: “Demasiadas personas –tanto jóvenes como de mayor edad– han perdido la noción de lo que es la vestimenta ejecutiva adecuada. La ropa descuidada, demasiado sexy, sucia, arrugada, percudida o desteñida es totalmente inapropiada para un lugar de trabajo”.

Vístase bien y en forma conservadora. Deje en su casa las calzas, el arito para la nariz, la tintura verde para el pelo, los buzos enormes y holgados, las remeras con inscripciones obscenas, el taco aguja, los vaqueros de tiro corto, las polleras micro-mini o la ropa interior a la vista. Según el Gerente de RR.HH. Roberto Rossi, Pretender que el empleador lo ‘acepte a usted tal cual es’ es una actitud genial si su intención es que nunca lo ascendamos o lo contratemos.

Para no tener que estar adivinando a la hora de decidir qué ponerse, vístase un poco más formal que un gerente promedio. Si la mayoría se pone jeans y una camisa sport, use jeans con saco y corbata. Si todos están de saco y corbata, póngase un traje. ¿Todos de traje? Preséntese con su mejor ambo.
La prolijidad es tan importante como la vestimenta adecuada. Lústrese los zapatos. La ropa debe estar limpia y bien planchada, no tiene que quedarle ni grande ni chica. Nada de sietes, agujeros o botones que faltan. El cabello debe estar bien peinado y las uñas limpias y recortadas. Que no se le vaya la mano con el maquillaje o la colonia.

Practique cómo da la mano, cómo mira a su interlocutor y cómo usa su lenguaje corporal. 
Salude al entrevistador con una sonrisa y ofrezca un apretón de manos firme. No hay nada que deje una impresión peor que dar la mano en forma debilucha y con dos dedos. El contacto ocular es fundamental, y transmite la sensación de que tanto usted como su mensaje son creíbles. En la reunión, no se quede sentado estoicamente con expresión ausente. Dará la impresión de “estar en otra” o incluso de estar poco interesado; lo tomarán por parco, aburrido y mecanizado. Sea usted mismo, sonría, mire a los ojos y utilice entonaciones vocales para subrayar lo que dice y ser agradable. Los movimientos, los gestos, la postura y las expresiones del rostro son una parte importante del desempeño general. Una sonrisa sincera envía un mensaje afable que da confianza.

jueves, 6 de junio de 2013

Quejas y reclamaciones

Aquí os dejo un vídeo explicativo sobre cómo debemos gestionar una queja o una reclamación dependiendo del perfil del cliente con el que estemos tratando. Espero que os resulte interesante puesto que ya sabemos qué son, aprender cómo desenvolvernos en esta situación.

lunes, 3 de junio de 2013

Políticos delatados por sus gestos - Lenguaje corporal de los más influyentes

Aquí os dejo un documental en el que se analiza el lenguaje corporal de algunos de los políticos más influyentes o conocidos por nosotros. ¿Qué emociones expresan? ¿Cómo detectar cuando mienten? ¿Por qué unos políticos son más carismáticos que otros?